5 de octubre de 2009

Animales maltratados

De algún modo tengo que externarlo porque, no estoy encabronada, sino lo que le sigue. Ojalá todos aquellos inconscientes que no cuidan a sus mascotas se pudran en el infierno o en su próxima vida les toque ser animales y algún otro imbécil los trate como ellos trataron a sus mascotas.

Desde hace algunos mese mi mujer y yo hemos andado moviéndonos a diversos lados y hemos contactado a fundaciones o asociaciones protectoras de animales para ayudar, principalmente, a perros y gatos que atraviesan por una situación crítica casi siempre por culpa de sus dueños negligentes.

En realidad, ayudar a las mascotas es fácil, los gatitos (o perritos) no oponen resistencia a la ayuda que se les brinda e incluso lo agradecen más que los propios humanos. Los servicios básicos veterinarios como la esterilización, vacunación y desparasitación son gratuitos en algunas instituciones de salud pública. Existen albergues en los que las mascotas pueden estar temporalmente en lo que encuentran un hogar definitivo. De igual manera hay muchísima gente que está dispuesta a adoptar a un amigo no humano.

Sin embargo, el 99% de problema, no radica en los animales sino en la infinita estupidez humana. Estos meses que hemos tratado con criaturas tan nobles como un perrito o un gatito, he aprendido a tener más amor y más compasión de un animal que de una persona.

Recuerdo que hace varios años cuando recién ingresé a la prepa, tuve una maestra de Historia de México que se dedicaba a ayudar a mascotas en riesgo. Una de mis compañeras se acercó a ella para solicitarle que interviniera en el caso de un vecino que mataba a golpes a los perros que tenía porque "ya eran muchos". Mi profesora muy solícita le brindó direcciones y teléfonos de asociaciones a donde podía reportar el caso e incluso intervenir de manera legal en contra de ese abuso hacia los perros. Mi compañera le comentó también que los hijos de ese vecino sufrían de la misma violencia por parte de su padre; la maestra la interrumpió y con cierto fastidio le dijo a la compañera que ella no se dedicaba a ayudar a personas ya que para eso los seres humanos contaban con la capacidad de hablar y comunicar sus necesidades. En ese momento recuerdo que me pareció nefasta la actitud de la profesora por querer ayudar a unos pinches perros en lugar de a unos niños inocentes.

La vida da tantas vueltas que hoy, 15 años después, comprendo perfectamente a mi maestra y apoyo su idea. Hemos visto casos tan patéticos de abuso animal que en verdad a veces desearía que mataran en la horca a quienes cometen semejantes atrocidades. Para muestra basta un botón. Entren a este blog y se darán cuenta de lo que les digo.

Es enfrentarse a la estupidez humana en todo su esplendor. Para ayudar a las víctimas (las mascotas) es necesario armarse de MUCHA paciencia y apuntarse desde ya en las listas de personas que esperan recibir un hígado.

Son tragos amargos que hay que pasar, pero mientras podamos encontrarle un hogar definitivo a un perrito o gatito que lo necesite, los entripados valen la pena.

Les dejo los links de tres sitios en donde pueden brindarle la calidez de una familia a un animalito.

http://protectora-animalia.blogspot.com/


http://www.perrosextraviados.org/

http://www.adoptaunamigo.org/

UN AMIGO NO SE COMPRA, SE ADOPTA

3 comentarios:

marichuy dijo...

Ya lo has dicho mi estimada Dolores: en el 99 por ciento de las desgracias, la razón de fondo es la estupidez humana. Trátese de animalitos o de otros hechos, siempre es la estupidez humana.

Yo pienso que si uno se sabe poco apto para tratar a un animalito, lo mejor es no tenerlo; pero ya ves, los snobismos llevan a la gente a adoptar o comprar mascotas con el único fin de estar a la moda, cuando en realidad no tienen los sentimientos ni el carácter que se necesita para ello. Muy triste.

Un beso

Yoyo dijo...

Recuerdo un día paseando por la calle, vi un gato tirado en el suelo, lo habian abierto de arriba a abajo, tenia los intestinos fuera, y lo peor... es que aun respiraba, con sus ojos abiertos, mirando hacia alrededor... esa escena me chocó tanto.. que aun parece que estuviera allí... llame a los bomberos y ahí mismo le inyectaron el suero de la muerte...

Estupidez humana, crueldad inhumana!!!
Así que mejor ni entro en el blog que dices, porque me puedo poner de muy mal humor!!!

Besos
Yoyo

Anónimo dijo...

anotadas las direcciones y los links preciosa, vaya que duele el ver cosas asi, y nos llamamos seres humanos, urghh
besos