30 de junio de 2009

Desdémona, la historia de un pañuelo


Marina de Tavira en el papel de Desdémona


Esta obra de teatro está inspirada en un personaje de una de las obras más famosas de Shakespeare, Otelo.

En la historia original, Otelo está casado con Desdémona, la hija de un senador veneciano. Por influencia de Yago, Otelo comienza a dudar sobre la fidelidad de su esposa hasta que sus celos lo llevan a degollarla.

En Desdémona, la historia de un pañuelo, de Paula Vogel, Desdémona es la protagonista de la obra junto con otras dos mujeres –que también son personajes secundarios de la obra de Shakespeare- Emilia y Bianca. En los inicios de la obra Desdémona se nos presenta como la típica niña caprichosa y presumida que sólo piensa en ella misma y, como todas las burguesas, trata con desdén a la servidumbre, como si les hiciera un favor al darles empleo. Es también una mujer que por decisiones masculinas terminó casada con Otelo y encerrada en una lujosa casa en Chipre, lejos de Venecia y de su familia. A diferencia de la Desdémona de Shakespeare (una mujer mansa, virtuosa y que termina siendo la víctima de los celos de su marido) la Desdémona de Paula Vogel es una mujer joven, apasionada, llena de vigor, con ganas de explorar el territorio de la sensualidad prohibido para ella y que ese deseo la lleva a suplantar a una prostituta en una casa de citas. Conforme transcurre la obra, se va revelando más y más de la compleja psique de Desdémona y las situaciones que la llevaron a su muerte.

Emilia es la sirvienta de Desdémona. Es esposa de Yago y es quien roba el famoso pañuelo para entregárselo a su marido y tenderle una trampa a la esposa de Otelo. También al inicio de la obra, la mucama se nos presenta como una mujer envidiosa que trata de dañar a Desdémona por celos. Conforme va pasando la historia, nos damos cuenta de que la verdadera intensión de Emilia es proteger a su ama y cubrir sus infidelidades.

El último personaje que se integra en la obra es el de Bianca, una prostituta de Chipre que se hace amiga de Desdémona y que también es dueña de un burdel. Bianca está enamorada de Casio, el hombre con quien se acusa a Desdémona de cometer adulterio.


Marianela Cataño, Zaide Silvia Gutiérrez y Marina de Tavira, las tres protagonistas de la obra

La obra es interesante desde la perspectiva femenina. Las tres mujeres están inconformes con sus vidas, las tres tienen sus diversos puntos de vista respecto al matrimonio: mientras Desdémona busca huir a toda costa de su infierno con Otelo, Bianca tiene la ilusión de formar una familia con Casio y dejar su profesión y Emilia simplemente se ha resignado a “cargar su cruz” como decía mi abuelita y seguir siendo el títere de Yago su marido.

El trágico final de Desdémona es por todos conocidos, sin embargo en Desdémona, la historia de un pañuelo Paula Vogel maneja un final aporético que siembra en la mente del espectador la posibilidad de que los personajes cambien sus destinos, cosa que se pone de manifiesto cuando la protagonista principal recupera su pañuelo.



Foro Sor Juana Inés de la Cruz
Insurgentes Sur 3000
Col. Universidad Nacional Autónoma De México

Tel. 56-65-65-83

Horario: jueves y viernes 20:00 hrs, sábado 19hrs y domingo 18hrs.
Las entradas están como en $130, si tienen credencial de estudiante o del INAPAM, está en $70 y los jueves el boleto cuesta $30 a todo el público en general

Autor: Paula Vogel, traducción y daptación de Alfredo Michel

Director: Benjamín Cann

La última función es el domingo 5 de julio. Así que ya saben, después de pasar el trago amargo de las elecciones, pueden ir a disfrutar de esta excelente puesta en escena.

29 de junio de 2009

El libro de los gorriones (fragmento)


LXXIX (55)

Una mujer me ha envenenado el alma:
otra mujer me ha envenenado el cuerpo;
ninguna de las dos vino a buscarme;
yo, de ninguna de las dos me quejo.

Como el mundo es redondo, el mundo rueda.
Si mañana, rodando, este veneno
envenena a su vez, ¿por qué acusarme?
¿Puedo dar más de lo que a mi me dieron?

(Gustavo Adolfo Bécquer, España 1836-1870)

22 de junio de 2009

De mal en peor...

Año con año la comunidad LGBT de México realiza una marcha con la finalidad de exigir ciertos derechos y hacer notar a ese grupo, muchas veces invisible, de homosexuales (hombre y mujeres) que habitamos en la Ciudad de México. En esta ocasión fue evidente que no hubo organización de ningún tipo.

Este año estoy completamente decepcionada de lo ocurrido durante ese espectáculo carnavalesco y patético en que se convirtió esta marcha.

Por lo que pudimos darnos cuenta, muchos de los asistentes desconocían el pliego petitorio que se tenía preparado para este año y sólo asistieron para desfogar sus energías o qué sé yo y dar espectáculos poco agradables en la vía pública. Para que sepan cuáles eran los puntos a tratar, aquí les menciono sólo algunos:

• Modificar la Ley de Sociedad de Convivencia para que a uno de los convivientes se le permita ingresar al Seguro Social a su pareja.
• Plantear la posibilidad de legalizar el matrimonio entre personas del mismo sexo
• Crear módulos de atención ciudadana para ayudar a grupos vulnerables
• Mayor difusión de los derechos de la comunidad LGBT, así como campañas de sensibilización
• Creación de más espacios culturales para la diversidad sexual
• Promover el DECÁLOGO POR LA DIVERSIDAD


Salí muy desanimada. El 99% de los asistentes no prestó atención a lo que se supone era el objetivo principal de esta movilización. Es la primera vez que a mí me toca ver que se venden bebidas alcohólicas en una manifestación de esta índole, lo cuál le quita seriedad al asunto; los grupos u organizaciones que tienen los pliegos petitorios, los dejaron hasta atrás de todo el carnaval; todavía el año pasado asistieron grupos de Lesbianas, Bisexuales, Transgénero, de padres de familia con hijos homosexuales o incluso universidades, y este año, al menos nosotros, no vimos a ninguno de esos grupos.

A mi me caga asistir a este tipo de eventos porque no me gustan las muchedumbres… simplemente no tolero que terceras personas invadan mi espacio vital. Estos últimos dos años hemos asistido porque una muy buena amiga nuestra que trabaja en la DGIDS (Dirección General de Igualdad y Diversidad Social) ha solicitado nuestro apoyo. Por lo menos nosotros vamos con la idea de informar y exigir ciertos derechos de manera pública, sin embargo la gran mayoría siente que está en una fiesta en la vía pública.

Una amiga nuestra, buga, casada y con un hijo de 3 años, asistió con nosotros con la mejor intensión del mundo de mostrar apoyo y de que su pequeño no vea mal en un futuro la situación en que nosotras (mi mujer y yo) vivimos, en la noche nos comentó: “Es la primera y última vez que las acompaño”. Realmente entiendo su malestar pues no resulta agradable ver a dos tipos encuerados y manoseándose en la calle a la luz del día, ni ofrecer servicios sexuales ($200 la mamada) a los automovilistas que van pasando, ni escuchar un montón de palabras altisonantes contra todo aquel que no sea homosexual, ni agredir a las familias que pasaban por ahí lanzándoles basura, ni acosando a los transeúntes con insinuaciones de lo más vulgares… No soy persignada, no me espanto tan fácil por cosas así, pero creo que hay momentos y hay lugares donde uno puede dar rienda suelta a sus "bajas pasiones" como dice mi madre, y la vía pública no es uno de ellos.

La verdad es que, además de decepcionada, estoy molesta. Espectáculos tan patéticos como los mostrados en la marcha incitan a la homofobia

¿Cómo pretendemos que nos tomen en serio o que nos respeten si lo único que el resto de la sociedad conoce de la comunidad homosexual son a las lacras que asistieron a hacer sus desmadres el sábado pasado?

No todos somos así. Conozco a muchísimos homosexuales (hombres y mujeres), con empleos dignos (profesores, ingenieros, abogados, etc.) que viven sus vidas con la mayor naturalidad, sin ocasionar problemas a terceros y, lo más importante, que RESPETAN a los demás. Lo triste del asunto es que esa parte de la comunidad LGBT es la invisible, la oculta, la que vale la pena pero los demás no notan por ignorancia o cualquier otro motivo.

No terminamos el recorrido programado porque los policías ya no nos dejaron pasar a pesar de que les mostramos los papeles que nos autorizaban a manifestarnos en la vía pública. Era de esperarse después de todo el desastre causado por los que iban delante de nosotros.

Sobra decir que el prox. año no asistiré. Primero porque estoy en contra de cualquier manifestación que bloqué avenidas y cierre calles; como conductora me frustra que, si tengo una emergencia, tengan que desviarme del camino y hacerme perder tiempo para poder llegar a mi destino… así perdí un trabajo. Y en segunda, porque me declaro totalmente ajena y no perteneciente a la parte de la comunidad LGBT que asiste a ese evento.

17 de junio de 2009

CI vs. CE

El Coeficiente Intelectual (CI o IQ en inglés) es una prueba estandarizada que se realiza con la finalidad de medir las habilidades lógico-matemáticas, verbales y cognitivas de una persona. Mi CI es de 115, es claro que no califico para la categoría de genio, pero al menos me consuela saber que soy menos estúpida que hace 10 años que realicé la prueba por primera vez y obtuve creo que 80.

Si quieren conocer su CI, den click aquí y vean qué tanto pueden responder en 30 minutos.

El CE (Coeficiente Emocional) es un término que se ha comenzado a utilizar recientemente en psicología y que se basa en la obra La Inteligencia Emocional de Daniel Goleman.

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[…]La inteligencia emocional, que postula que el coeficiente intelectual por sí solo es un factor que no garantiza el éxito en la vida.

Muchas veces sorprende enterarse que personas que parecían destinadas a convertirse en exitosos profesionales y que tendrían matrimonios felices, con el tiempo fracasaron paulatinamente en sus trabajos o en sus relaciones de pareja, y terminaron desempeñándose en labores mediocres y con sus vidas arruinadas. Otros, en cambio, que nunca destacaron en el colegio, llegaron a ser personas felices, plenas y realizadas.

¿Por qué algunas personas parecen dotadas de un don especial que les permite vivir bien, aunque no sobresalgan por su inteligencia? ¿Por qué unos son más capaces que otros para enfrentar los contratiempos, superar obstáculos y ver las dificultades bajo una óptica distinta?

Un nuevo concepto de la psicología está tratando de dar respuestas a estas interrogantes. Al parecer, para tener éxito en la difícil vida moderna, tanto o quizás más importante que las habilidades intelectuales son las capacidades para expresar y manejar sentimientos y emociones: la inteligencia emocional.

Conocer las propias emociones: La conciencia de uno mismo -el reconocer un sentimiento mientras ocurre- es la clave de la inteligencia emocional para ser nuestro propio guía en la vida. La incapacidad de advertir nuestras auténticas emociones nos deja a merced de las mismas.

Manejar las emociones: Quienes carecen de esta destreza luchan constantemente contra sentimientos de aflicción, mientras que quienes la tienen desarrollada se recuperan más rápidamente de reveses y trastornos de la vida. El objetivo de esto es el equilibrio, no la supresión emocional: cada sentimiento tiene su valor y su significado. Cuando las emociones son demasiado apagadas crean aburrimiento y distancia. […]

Daniel Goleman, La Inteligencia Emocional

En 1998 el periódico USA Today realizó un test para medir el CE. Se los dejo para que lo resuelvan. La escala de medición tiene un error ya que el puntaje máximo no puede superar los 88 puntos. Mi CE fue de 64, considero que estoy dentro del promedio.

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Test de Coeficiente Emocional


Por el U.S.A.Today.
1998.


El siguiente es un examen, no una herramienta científica para medir su coeficiente de inteligencia emocional (C.I.E.). Para contestarlo, responda a las preguntas con el sistema de puntos siguiente:

  • Siempre es cierto en mi caso: 0 (cero) puntos.
  • Casi siempre es cierto en mi caso: 1 punto.
  • A veces es cierto en mi caso: 2 puntos.
  • Casi nunca es cierto en mi caso: 3 puntos.
  • Nunca es cierto en mi caso: 4 puntos.


1. No me siento bien con mi apariencia. ___
2. Me dicen que estoy trabajando demasiado. ___
3. Experimento una buena cantidad de estrés en mi vida. ___
4. Tengo algunos hábitos que parece que no puedo cambiar. ___
5. Tiendo a criticar a los demás. ___
6. Me frustro cuando las cosas no salen como yo espero. ___
7. Tengo dificultad para controlar mi enojo. ___
8. No estoy en contacto con mis sentimientos. ___
9. Se me hace difícil reírme de mí mismo cuando cometo errores. ___
10. Odio cometer errores. ___
11. Tiendo a compararme con otros. ___
12. Tiendo a ponerme de mal carácter o a deprimirme. ___
13. Tiendo a ponerme en último lugar. ___
14. Tengo dificultad para decir que no. ___
15. No tengo una alta autoestima. ___
16. A veces tiendo a ponerme ansioso. ___
17. Tiendo a preocuparme. ___
18. Tiendo a impacientarme. ___
19. No me siento feliz ni tan satisfecho como me gustaría. ___
20. No me preocupan los demás. ___
21. Por lo general, me llevo bien con los demás. ___
22. Me siento apresurado. ___

Mi calificación total fue de ______ puntos.

Según los expertos, así se proyecta su coeficiente emocional:

De 0 a 30 puntos: Muy bajo.
De 31 a 55: Bajo.
De 56 a 74: Medio.
De 75 a 89: Alto.
De 90 a 100: Muy alto.

9 de junio de 2009

AÏCHA



Para BITTER con mucho cariño, lo prometido es deuda :)

Historicamente se dice que A'isha fue la esposa favorita de Mahoma. Su nombre significa "la que vive" y ha sufrido diversas variaciones como: Aiesha, Aishah, Ayesha o Aïcha. Éste último fue también el nombre que inspiró una de mis canciones favoritas escrita por los compositores y cantantes Jean-Jaques Goldman y Cheb Khaled.

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La canción ha sido polémica por su contenido político que está a favor de la emancipación de las mujeres, cabe reordar que en los países musulmanes las mujeres tienen muy poca o nula participación política y social. A grandes rasgos la canción trata de un hombre que está perdidamente enamorado de Aïcha, le ofrece todas las riquezas del mundo (oro, perlas, las palabras más hermosas, etc.) pero ella lo rechaza diciéndole:

Elle a dit, garde tes trésors: Ella me dijo, guarda tus tesoros
Moi, je vaux mieux que tout ça: Yo valgo más que todo eso
Des barreaux sont des barreaux même en or: Una jaula siempre será una prisión aunque sea de oro
Je veux les mêmes droits que toi: Quiero los mismos derechos que tú
Et du respect pour chaque jour: Y respeto cada día
Moi je ne veux que de l'amour: No quiero nada más que amor




Aïcha también es una canción que invita al respeto no sólo hacia las mujeres, sino a cualquier persona sin importar su género, condición social o creencia religiosa. El hecho de que Goldman sea de origen judío y Khaled de origen musulmán, dice más que mil palabras.

De esta canción se han hecho varias versiones, una en hebreo interpretada por Haim Moshe,



otra en polaco interpretada por Magma,



otra en wolof (una lengua hablada en Senegal, Gambia y Mauritania) interpretada por Africando a ritmo de salsa,



otra a ritmo de zouk interpretada por Kassav,



y hasta una versión en español interpretada por Amistades Peligrosas.



Hay una versión en árabe que canta Cheb Khaled, pero esa no pude conseguirla, sin embargo pueden escuchar un fragmento en la interpretación de Amistades Peligrosas. En lo particular la versión que más me gusta es en inglés con Outlandish, uno de mis grupos favoritos. Les dejo la canción y el video para que los disfruten.





Si alguien gusta algunas de estas canciones, con todo gusto se las puedo enviar :)

Fuente: Wikipedia/Aïcha

P.S: La gatita de arriba que es mi mascota virtual en Myspace, se llama AISHA porque cuando la adopté estaba escuchando esa canción

3 de junio de 2009

Espejo de tres cuerpos







ESPEJO DE TRES CUERPOS
Odette Alonso
Ed. Quimera










Espejo de tres cuerpos es una novela corta, sencilla y digerible. La historia es simple, un triangulo amoroso "el más prohibido de todos" según palabras de la contraportada, en el que madre e hija se enamoran de la misma persona, en este caso, de la misma mujer.


Ángeles, la madre, es una profesora de universidad divorciada y con una hija en la etapa de la aborrecencia con la que lleva una mala relación. Un día llega al colegio Berenice, una nueva profesora, y el mundo de Ángeles se transforma; la atracción que ambas sienten es muy fuerte desde el inicio aunque las cosas no serán sencillas, para ninguna de las dos, dada la naturaleza de su relación.

Uno de los problemas a los que se tienen que enfrentar es a la cuestión laboral, cuando el director se entera de que dos profesoras sostienen un romance, decide tomar medidas drásticas y despide a Berenice del trabajo. Lógicamente el director disfraza ese despido argumentando la falta de presupuesto para la materia que imparte, aunque en el fondo la razón es otra.

Desde ese momento Berenice se va a vivir a casa de Ángeles y las vidas de ambas se complican aún más. Primero porque Berenice no encuentra empleo en ningun lado -lo que la lleva a depender totalmente de Ángeles- y después porque Raquel, la hija de Ángeles, trata de hacerles la vida imposible divulgando la relación que ellas trataban de llevar con discreción.

Así pasan algunos años en los que la relación de las maestras sufre diversas transformaciones. Ángeles logra ascender en el trabajo y tiene la oportunidad de estudiar un doctorado, mientras que la odiosa de su hija entra a la universidad. Berenice es quien se queda estancada en el ámbito profesional ya que su pareja le exije que permanezca en casa para cuidar de Raquel y sólo imparte una vez a la semana un taller de literatura y redacción.

La ausencia de Ángeles en la casa por cuestiones laborales ocasiona un distanciamiento entre ella y Berenice. La hija aprovecha esa situación y se involucra con Berenice... y ahí las cosas se complican aún más.

El final de la historia es muy predecible, de ese triángulo amoroso sólo puede salir la que no comparte lazos sanguíneos con nadie, lo cual me decepcionó. A los tres personajes les faltó fuerza en la novela; en la mitad de la historia Ángeles comienza brillar por su ausencia; Raquel, la escuincla odiosa, al final resulta más estúpida que malvada y Berenice en ocasiones parece no tener voluntad al dejarse llevar como hoja en el viento. Sin embargo lo que me gustó mucho es que el problema que implica una relación de dos mujeres en el ámbito social, familiar y laboral está manejado de manera sencilla pero concreta.