Mi tránsito por distintas marcas de cigarro ha sido variado. En la preparatoria solía fumar Viceroy Light, aquellos que tenían una estrella en el filtro. Después cambié a Benson’s dorados, luego a Benson’s mentolados y después, en mi etapa de fumadora social, de la marca que tuvieran los amigos a quienes frecuentaba.
Hace aprox. dos años probé un tabaco tostado Lucky Strike y desde entonces ésta se ha convertido en una de mis marcas favoritas. Me agradan también los Delicados sin filtro, ovalados, con papel arroz que dejaron de vender por varios años en el DF. Desde hace 15 días, por encargo de alguien muy especial, compré una cajetilla de cigarros cubanos Popular que me resultaron muy agradables. Lo admito, siempre he sido muy puñal como para fumar puro, sin embargo el cigarro cubano tiene el sabor del puro y la suavidad del cigarro.
Así como para mí estas tres marcas de cigarro tienen un tipo de tabaco que me agrada, para J. M. Barrie (autor de Peter Pan) la “mezcla Arcadia” resulta ser la mezcla de tabaco para pipa más exquisita del mundo y la que juega el papel de hilo conductor que va entrelazando los relatos de Lady Nicotina. Todas estas historias tienen como personaje (a veces principal y a veces secundario) al hábito de fumar. El narrador –que nunca sabemos si es J. M. Barrie o algún fumador ficticio- va describiendo cómo ese grupo peculiar de amigos que habitan en el mismo piso, se juntan cada noche para disfrutar la mezcla Arcadia y olvidarse un rato de las presiones del día. Poco a poco el autor nos va platicando acerca de las características particulares de cada uno de los amigos que fuman la mencionada mezcla y la manera en que el hábito de fumar es parte importante en sus vidas. Por ejemplo, está Jimmy un abogado de profesión que sobrevive como columnista en un periódico y para quien su pipa es la mejor aliada para escribir sus artículos; o Gilray, un hombre anamoradizo que, así como cree haber encontrado el amor en cada mujer que ve, se decepciona y lo único que le puede ayudar a sobrellevar esas penas de amor, es fumar su pipa de espuma de mar.
En la misma edición donde viene el libro de Barrie, también se encuentra Del placer y del vicio de fumar, otra serie de relatos del escritor Italo Svevo. He de confesar que este segundo libro me gusto más que el de Lady Nicotina ya que algunos artículos que Svevo escribió para diversas revistas y las cartas que enviaba a su esposa cuando salía de viaje de trabajo, se encuentran recopilados en este volumen y se enfocan en lo que verdaderamente es el vicio de fumar junto con todos los conflictos que implica el querer dejarlo ya sea por salud, porque la esposa lo exige, porque se podría ahorrar una buena cantidad de dinero suprimiendo el gasto de los cigarrillos, etc. Sin embargo, el autor también reconoce el placer que el tabaco da al organismo y al espíritu “más vale fumar con alegría, pues hace menos daño”. Las experiencias que Italo Svevo comparte oscilan entre su dependencia a la nicotina y los múltiples intentos (siempre fallidos) por dejarla.
Sobra decir que el mejor homenaje que se le puede hacer a ambas obras es sentarse cómodamente acompañando la lectura con el cigarro que sea de su preferencia.
J. M. Barrie/ Italo Svevo
Ed. Capitán Swing Libros
2 comentarios:
Bien, por fin, una eternidad para recordar el nombre de los benditos cigarros con la estrella.
gracias por despertar mi memoria emotiva unos minutos.
Los Viceroy eran la neta, jeje. Lástima que ya no los vendan.
Besos chilangos
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